¡Mirad qué manzana más rica en el jardín de mis vecinos! ¿A que dan ganas de darle un bocado ahora mismo?
Le voy a pedir a mi vecino que me deje coger unas cuantas, y prepararlas asadas, o con confituras, o servirlas naturales, tal cual… en una bandeja vintage de mis Cositas. ¡Qué merendola más buena!
No me extraña que sea el símbolo de la tentación, viéndola así…