El sentimiento de atracción por lo vintage, sin duda, se acentúa en Navidad.
La Navidad es la época del año en que la mayoría de nosotros nos permitimos a nosotros mismos ser nostálgicos. Anhelar los momentos felices de nuestra infancia (incluso de nuestro pasado colectivo). Sentimos nostalgia de nuestro pasado, pero curiosamente también nos vemos atraídos por épocas anteriores a nuestra existencia que jamás llegamos a vivir. Épocas en las que lo hecho a mano y a conciencia imperaba, el gusto por lo bien hecho, ante el “usar y tirar” de los tiempos actuales.
Hay siglos muy lejanos a nuestras propias vida, pero que año tras año, emocionalmente nos resulta reconfortante ver las costumbres y recreaciones de las ciudades como Londres (con sus costumbres Victorianas)
o París durante el mes de Diciembre.
La filosofía vintage impregna nuestras vidas, la fotografía en blanco y negro o color sepia. El arte del revelado a mano, artesanalmente.
Y cómo no, el cine y la televisión son una de las formas en que nos permitimos esas vacaciones culturales a la nostalgia.
Recordemos épocas pasadas y para hacerlo, aquí tenéis a Frank Sinatra y Bing Crosby, y una muestra su arte y perfección a la hora de poner a punto con todo su swing, una intrascendente canción Navideña como Jingle Bells.
En Cositas de Inés disfruto seleccionando regalos vintage que nos transportan a esos recuerdos propios o colectivos tan mágicos.